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viernes, 12 de febrero de 2010

Algunos Antecedentes.


Las experiencias de los médicos de combate en la Segunda Guerra Mundial, Corea y Vietnam, junto con su creciente comprensión de la asistencia sobre el terreno, evacuación rápida, transporte y el tratamiento definitivo de los lesionados en combate, son las bases sobre las cuales se sustenta el cuidado táctico de las bajas en combate. Mientras los equipos de SWAT comenzaron a aparecer en la década de 1960, como consecuencia de incidentes como el del francotirador de la Torre de Texas, el tiroteo en Los Ángeles con el Ejército Simbionés de Liberación, y muchos otros actos, se reconoció que el apoyo médico de algún tipo sería necesario para las unidades en misiones de alto riesgo. El modelo propuesto se baso en el modelo militar del médico de combate, sugiriendo que fuera parte de la unidad táctica. Más concretamente, estos técnicos (básico al principio y luego de nivel paramédico) eran un equipo médico de operaciones especiales. Algunos de los policías y paramédicos que formaban estas unidades tácticas, con frecuencia eran veteranos de Vietnam, durante muchos años en estados unidos, había muy pocas unidades a nivel nacional. Un departamento que comenzó su equipo SWAT y el programa médico en esa época en la década de 1970 fue el del Sheriff del Condado de Pima, en Tucson, Arizona. El cual ha estado en operación continua como un equipo SWAT con el apoyo de médicos internos desde hace más de 30 años. Es importante hacer mención que para el mejor funcionamiento de un equipo medico táctico en una fuerza de seguridad publica, es necesario que el personal que lo integre tenga la formación en tres esferas: ser oficial de policía, ser proveedor de servicios médicos y ser oficial de técnicas especiales de intervención(técnicas SWAT). Por esta razón, y debido al alto costo de la capacitacion del personal integrante de estos cuerpos, la mayoría de los equipos de SWAT, incluso hoy en día, utilizan el apoyo médico externo para su equipo.
Desde la década de 1960 hasta de la década de 1980 hubo un mosaico aislado de los equipos que desarrollaron sus propias versiones de apoyo médico táctico. La necesidad de reconsiderar la atención al trauma en el entorno táctico ha sido ampliamente reconocida. El proyecto Tactical Combat Casualty Care (CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE) fue iniciado por El Comando de Guerra Naval Especial (Naval Special Warfare Command) en 1993, y continuado posteriormente por el Comando de Operaciones Especiales de Estados Unidos (U.S. Special Operations Command (USSOCOM)). Este esfuerzo desarrolló un conjunto de protocolos de atención al trauma en combate tácticamente apropiados que fueron publicados como suplemento en la revista de Medicina Militar en 1996. Las directrices del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE proporcionan a los médicos de combate estrategias de manejo del trauma en combate. 

El primer curso de CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE tuvo lugar en 1996 en la Oficina Médica Subacuática patrocinado por la Oficina de Medicina y Cirugía Naval (BUMED). Poco después, este entrenamiento fue obligatorio para todos paramédicos de los SEAL (grupos de operaciones especiales de la Armada de los Estados Unidos. Su nombre es un acrónimo de Sea, Air and Land (Mar, Aire y Tierra)). Desde entonces, ha ido ganado gradualmente aceptación en las Fuerzas Armadas. Así mismo ha encontrado una gran aceptación en la comunidad médica civil de las fuerzas de seguridad. La incorporación de las directrices del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE en el manual de Soporte Vital al Trauma Prehospitalario (PHTLS) fue un importante avance en el proceso de transición del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE. La cuarta edición de este manual, publicado en 1999, contiene por vez primera un capitulo de medicina militar. Las recomendaciones contenidas en el manual PHTLS llevan la aprobación del Comité de Trauma del Colegio Americano de Cirujanos y de la Asociación Nacional de Técnicos en Emergencias.
La necesidad de una actualización periódica de las directrices del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE fue reconocida. El documento original recomendaba que las directrices fueran actualizadas como sea necesario por un comité del Departamento de Defensa creado para tal efecto. Este concepto fue aprobado por el Mando de Operaciones Especiales de los Estados Unidos, y el Comité del Tactical Combat Casualty Care (CoTCCC), el cual fue fundado posteriormente en 2002 como parte del proyecto de investigación biomédica del USSOCOM. En 2007, se vio incrementado el protagonismo del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE en la Guerra Global Contra el Terrorismo. En marzo de 2008. el CoTCCC fue recolocado para funcionar como una subsecretaría del Consejo de Salud del departamento de Defensa de los Estados Unidos.
El Comité, actualiza las directrices basándose en:
1) en la revisión continua de las publicaciones de medicina prehospitalaria civiles y militares;
2) en la interacción continua con los laboratorios militares de investigación de atención a heridos en combate;
3) datos de primera mano procedentes de sanitarios de combate, médicos,
4) opiniones de expertos tanto militares como civiles.

Históricamente, muchas de las lecciones aprendidas en la asistencia de heridos en el ámbito militar han encontrado aplicación en la atención al trauma civil. 

En fechas recientes, los servicios médicos de emergencia civiles han sido llamados para prestar asistencia en numerosos tiroteos en escuelas, tiroteos en centros comerciales, y otros actos de terrorismo que presentan factores tácticos similares a los encontrados en el combate. La amenaza de recibir fuego hostil, teniendo que asistir a múltiples heridos a cubierto, y tiempos prolongados de evacuación han entrado en juego. 

Las masacres de Columbine y del Tecnológico de Virginia son ejemplos que ilustran que, incluso en entornos urbanos, comenzar el tratamiento, y el transporte de heridos puede requerir tácticas y entrenamiento fuera de los parámetros de los protocolos estándar del SEM. 

La adopción de las directrices aplicables del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE dentro de los programas tácticos del SEM y la aplicación de estos principios a las operaciones tácticas de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado puede resultar en una mejor continuidad táctica y vidas adicionales salvadas cuando los heridos se producen durante el transcurso de estas operaciones.

martes, 2 de febrero de 2010

continuamos...


Hasta el 90% de heridos en combate mueren antes de poder recibir atención medica en un establecimiento medico, la suerte y sobrevenida de estos pacientes se encuentra en manos de quien les proporciona la primera atención.
Las diferencias de la atención prehospitalaria civil y la medicina táctica son muy marcadas, si bien las dos disciplinas velan por la recuperación de los lesionados, en la medicina táctica, priva la falta de material y equipo, las causas del trauma son diferentes, el entorno (condiciones de obscuridad, fuego cruzado, áreas con gases, etc.) ambientes extremos ( montaña, desierto), la misión de la unidad, el tiempo de evacuación puede ser mucho mas largo en el entorno táctico.
Los objetivos fundamentales de la medicina táctica son: tratar a las bajas, prevenir mas bajas y completar la misión.

Fases del Cuidado Táctico de Bajas en Combate (CTBC):
El cuidado táctico de las bajas en combate, se centra en la situación que prevalece, dependiendo de la situación táctica, el personal de paramédicos tácticos, se encontraran: bajo fuego enemigo, en el campo táctico, o en la evacuación de las bajas. Estas son las tres fases del cuidado táctico de bajas en combate.